Querido consiervo:
El Presidente de la Nación recientemente anunció la extensión de la cuarentena hasta el 27 de abril 2020, con muchas probabilidades de extenderla hasta el domingo 3 de mayo. Luego comenzará un proceso lento de restablecimiento de todas las actividades de la sociedad. Continuarán sin funcionar cines, teatros eventos deportivos, etc.. Lo mismo sucederá con las escuelas, también permanecerán cerradas. Sin dudar, los cultos, los servicios religiosos, correrán la misma suerte que las actividades antes mencionadas. Aquellas que involucren aglutinamiento de personas estarán posiblemente a la cola de este proceso. La realidad nos impone seguir teniendo los templos cerrados. Cuidando a nuestras congregaciones, fomentando el aislamiento social físico. Podemos decir: “Templos cerrados, Iglesias abiertas”.
Nos hemos dado cuenta que la Iglesia no es el edificio. Recordemos que solo después del año 330, fecha en que Constantino institucionaliza a la fe cristiana en el imperio Romano, las iglesias tendrán por primera vez templos. Antes no tenían edificios si no que se reunían en los lugares públicos. De ahí el nombre Ekklesia en griego que significa asamblea pública, y también en los hogares.
Estos nuevos acontecimientos (por el COVID-19) nos han obligado a descubrir nuevas maneras de vincularnos y mantener los lazos. Grupos de whatsapp, conferencias en internet, células o grupos de manera digital usando las diferentes plataformas Skype, Zoom u otros. Cultos on line en YouTube. Seguimiento por envió de email. Muchas personas nuevas y apartadas volviéndose a Jesús. Sin dudas, para muchos de nosotros todo un nuevo mundo a seguir descubriendo.
Muchos se preguntan cómo seguir funcionando si todo esta cerrado. Habrá que interactuar de cerca con las autoridades locales para ver cómo implementan la cuarentena y su futura flexibilización. La gran pregunta es ¿cómo haremos con todas las responsabilidades que tenemos si el templo esta cerrado? Alquileres, manteniendo de edificios, ampliaciones edilicias, obras misioneras, asistencia y acción social, y todas las actividades que se sostienen por el voluntariado y las ofrendas. Aprovecho a adjuntarles un informe detallado preparado por el Dr. Guillermo Rodriguez (haz clic aquí para bajarlo), que contiene información de sumo interés referido a los decretos sobre condiciones de pago de alquileres y servicios. Los mimos nos detallan flexibilidades financieras para hallar un desahogo sobre nuestras acotadas económicas
Dias atrás, los vecinos denunciaron a una congregación por celebrar culto violando la cuarentena vigente en la ciudad de la Banda en la provincia de Santiago del Estero.
Ver noticia aquí.
Hoy, la condena social sobre la iglesia será implacable. Sin importar donde se encuentra la congregación, sea esta grande o pequeña. Ahora, cabe la pregunta ¿cómo levantar luego el testimonio de quienes pusieron en riesgo a una comunidad mientras que su objetivo debería de ser salvarla, asistirla y contenerla?
A fines de marzo, el pastor Thiebault Geyer de Francia, de una ciudad llamada Mulhouse, la cual ha sido una de las de mayor brote epidémico, pidió perdón públicamente debido a que un mes antes haciendo caso omiso a las advertencias reunió a más de dos mil personas en un culto. Según informan los medios locales, de esa reunión se calculan entre 500 a 800 personas infectadas. Al momento del pedido de perdón la iglesia Christian Open Door Church (Iglesia Cristiana Puerta Abierta) llevaba una triste estadística de 2500 personas contagiadas y al menos 17 personas fallecidas a causa del virus Covid-19.
Muchos sostienen que fue una de las principales puertas de entrada para el coronavirus en Francia. El pastor Geyer aseguró en un video que se hizo viral que “cuando escuché hablar del coronavirus y cuando vi a todos los medios que hablaban cada día, fui superficial, pensé solo en estadísticas. Pido perdón”.
Dias atrás participé de una videoconferencia donde se encontraban ministros representativos del mundo. Cada uno contó de que están viviendo su realidad en relación con el COVID-19. El asombro se generó cuando le toco hablar al pastor de la congregación mas grande de Paris, Francia y confirmó lo que los diarios ya habían mencionado. Una actitud “xenofoevangelica” se había desatado en Francia por lo acontecido en la congregación liderada por el pastor Thiebault Geyer, como antes mencione en detalles
Creemos que este testimonio habla por sí mismo y que más que nunca necesitamos aceptar que es necesario cerrar los templos por un tiempo, hasta tanto las autoridades sanitarias locales consideren que es oportuno. Por supuesto que esto despierta otra preocupación ¿qué hacemos con los retos y desafíos que tenemos?
Necesitamos regresar al inicio de nuestro ministerio para reencontarnos con la fortaleza del llamado. Cada vez que me encontré en serias pruebas, como te debe haber pasado, recurrí al momento de mi llamado. La fuerza del ministerio se encuentra en ese momento clave. Solo los llamados superan las pruebas que inexorablemente el ministerio conlleva. Así le aconteció al resignado Moises que después de 40 años de soledad completa en el desierto, una mañana como cualquier otra, vio una zarza arder y no consumirse. De esa Zarza brotó la voz que lo introduciría en el llamado: “Moises, Moises dijo la voz de Dios”. Todo lo demás seria parte de la historia que conocemos. Pruebas, plagas, el poder de Faraón, sus ejércitos y el infranqueable Mar Rojo que se anteponía a su liberación. Recordá por un instante aquel altar. Aquella circunstancia donde le dijiste “Heme aquí Señor, yo iré”. Nada importaba solo era seguirle sin saber qué seria de nuestro destino. Como el padre de la FE, Abraham, salimos sin saber hacia dónde íbamos y con qué circunstancia nos íbamos a tener que enfrentar. Dónde viviríamos. Qué comeríamos. Cuál seria nuestra suerte. Definitivamente podemos decir sin equivocarnos 'Hasta aquí nos ha ayudado Dios”. ¿Y por qué no creer que lo seguirá haciendo? De manera milagrosa veremos su mano, proveyéndonos, sustentándonos.
“Los Templos están cerrados, pero la Iglesia no esta cerrada”. Como pastores estamos para caminar juntos, apoyarnos, estimularnos y de esta manera ser la voz de esperanza que Argentina necesita oír.
Sin dudar un instante, puedo decir hasta aquí Dios ha sido fiel. Nunca, en tantos años de ministerio, dependí de un diezmo o contribución determinada. Sabía que Dios sería mi sustento para mí, mi familia, y la visión que había recibido. Descubriendo que: “el que te llama, te sostiene”. Resuenan mas que nunca la voz de Jesus: “Las puertas del hades no prevalecerán contra la Iglesia”.
Mas que nunca Argentina necesita una Iglesia valiente que se levanta para proclamar que Jesucristo es el Salvador, una Iglesia que hace misericordia del que sufre y acompaña al que padece.
Estoy convencido que Dios esta en control de todo. Sin temor podemos declarar: “El mundo está en Crisis, mas Dios el que te llamó, no está en crisis”.
Por el Consejo Directivo Nacional
Ptr. Osvaldo Carnival
Vicepresidente de relaciones externas
